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Reino Unido quiere reconocer las criptomonedas como propiedad personal

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El gobierno del Reino Unido ha dado un paso significativo en la regulación de los criptoactivos al introducir un proyecto de ley en el Parlamento que busca definir formalmente los criptoactivos, incluidos los tokens no fungibles (NFT) y otros activos digitales, como una nueva forma de propiedad. Esta medida, si es aprobada, marcaría un cambio fundamental en la forma en que el sistema legal británico aborda la creciente presencia de los activos digitales en la economía.

Hasta ahora, los criptoactivos se encontraban en una especie de zona gris legal en lo que respecta a las leyes de propiedad de Inglaterra y Gales. Los propietarios de estos activos no siempre contaban con la protección legal que sí tienen los bienes físicos o los derechos sobre ciertos bienes intangibles, como las deudas o las acciones. Con la nueva legislación, el gobierno busca aclarar esta situación y proporcionar a los propietarios de criptoactivos los mismos derechos de propiedad que a los propietarios de bienes tradicionales.

La nueva categoría de propiedad para los activos digitales

Actualmente, el sistema legal británico clasifica la propiedad en dos grandes categorías: los «bienes en posesión», que incluyen objetos tangibles como el oro, el dinero o los automóviles; y los «bienes en acción», que abarcan derechos sobre bienes intangibles, como deudas o acciones. Sin embargo, el auge de los criptoactivos ha desafiado estas definiciones tradicionales, ya que los activos digitales no encajan claramente en ninguna de las dos categorías existentes.

El proyecto de ley presentado por el gobierno introduce una tercera categoría de propiedad, destinada a incluir los criptoactivos y otros activos digitales dentro del marco legal británico. Esto permitiría a los propietarios de estos activos digitales beneficiarse de los derechos de propiedad personal, lo que significa que estarían mejor protegidos frente a interferencias ilegales o fraudes.

Según Heidi Alexander, Ministra de Estado del Ministerio de Justicia, esta medida es un hito en la historia británica. En una declaración oficial, subrayó que la ausencia de una definición clara de los criptoactivos en el derecho de propiedad había dejado a los propietarios de estos activos en una situación vulnerable. Con esta nueva legislación, el Reino Unido busca no solo proteger a los propietarios, sino también consolidarse como un líder global en el emergente sector de los criptoactivos.

Implicaciones económicas y competitividad global

Además de la protección legal que ofrecería a los propietarios de criptoactivos, el proyecto de ley tiene importantes implicaciones económicas. Según la declaración del Ministerio de Justicia, los activos digitales aportan actualmente 34 mil millones de libras anuales a la economía del Reino Unido. Al definir los criptoactivos como una forma de propiedad, el gobierno espera atraer más inversiones y negocios en el sector de la tecnología y las finanzas, fortaleciendo así su posición como un centro global de innovación digital.

Este proyecto de ley también refleja un intento por parte del Reino Unido de mantenerse competitivo en el escenario internacional. Países de todo el mundo están desarrollando regulaciones para los criptoactivos y el Reino Unido, bajo el liderazgo de figuras como el ex primer ministro Rishi Sunak, ha expresado su intención de convertirse en un centro neurálgico para los activos digitales. No obstante, este enfoque ha sido algo contradictorio, ya que mientras algunos líderes británicos ven en los criptoactivos una oportunidad de crecimiento, los organismos reguladores como la Autoridad de Conducta Financiera (FCA) han emitido repetidas advertencias sobre los riesgos de invertir en este tipo de activos.

El proyecto de ley surge como respuesta a un informe de la Comisión de Derecho de 2023, el cual concluía que los activos digitales no encajan ni en la categoría de «bienes en posesión» ni en la de «bienes en acción», pero que aun así deberían ser considerados como propiedad. Este informe, y el consiguiente proyecto de ley, busca cerrar esa brecha legal y ofrecer un marco más claro y seguro para los propietarios de criptoactivos.

La introducción de este proyecto de ley por parte del gobierno del Reino Unido es un paso clave para regular los criptoactivos y adaptarse a las realidades de una economía cada vez más digital. Al definir formalmente los criptoactivos como una nueva forma de propiedad, el Reino Unido no solo busca proteger a los propietarios de estos activos, sino también consolidarse como un líder global en la industria de los activos digitales. A medida que otros países también avanzan en la regulación de estos activos, el éxito o fracaso de este proyecto de ley podría tener un impacto significativo en la posición del Reino Unido en el escenario internacional de las finanzas digitales.

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